A medida que envejecemos, el cuerpo cambia y se vuelve más vulnerable a ciertos riesgos cotidianos. Uno de los más subestimados es el momento del baño, una actividad aparentemente inofensiva que, mal ejecutada o en el horario equivocado, puede ser muy peligrosa.
⚠️ El mayor riesgo: las primeras horas de la mañana
Diversos estudios y expertos en geriatría advierten que la hora más peligrosa para bañarse después de los 70 años es entre las 5:00 a.m. y 8:00 a.m. Durante este periodo, el cuerpo aún no ha alcanzado su temperatura corporal ideal, la presión arterial está baja y el sistema circulatorio es más lento.
Esto puede provocar:
- Mareos repentinos
- Pérdida de equilibrio
- Hipotermia
- Desmayos en la ducha
- Paro cardíaco en casos extremos
🧠 ¿Por qué pasa esto?
Durante la noche, el cuerpo entra en un estado de descanso profundo. Al despertarse, sobre todo si no ha habido un calentamiento gradual (como caminar o tomar un té caliente), exponerlo de inmediato al agua —especialmente si está muy caliente o muy fría— puede provocar un choque térmico.
Esto puede alterar:
- La frecuencia cardíaca
- La presión arterial
- El ritmo respiratorio
En adultos mayores, cuyas defensas físicas son más delicadas, esta reacción puede ser fatal.
🚿 ¿Cuál es el mejor momento para bañarse después de los 70?
La mejor hora para que una persona mayor se bañe es después del desayuno, entre las 9:00 a.m. y las 11:00 a.m.
Este horario permite:
- Que el cuerpo ya haya entrado en calor
- Que el estómago tenga alimento y energía
- Que los medicamentos hayan hecho efecto (si los toma por la mañana)
- Reducir los riesgos de caídas y mareos
Además, siempre se recomienda:
- Usar alfombras antideslizantes
- Contar con un banco o silla de baño
- No cerrar completamente la puerta del baño
- Tener a alguien cerca si hay historial de desmayos
❤️ Cuidar el baño es cuidar la vida
A partir de los 70 años, el baño se convierte en una zona de riesgo si no se toman precauciones. Evitar bañarse muy temprano y elegir un horario más seguro puede marcar la diferencia entre un día normal y una emergencia médica.
Recuerda: la prevención siempre será la mejor medicina.